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2/1/10

El Desarrollo Sustentable, Sostenible o Perdurable

El término desarrollo sostenible, perdurable o sustentable se aplica al desarrollo socio-económico y fue formalizado por primera vez en el documento conocido como Informe Brundtland (1987), fruto de los trabajos de la Comisión Mundial de Medio Ambiente y Desarrollo de Naciones Unidas, creada en Asamblea de las Naciones Unidas en 1983. Dicha definición se asumiría en el Principio 3.º de la Declaración de Río (1992):



"Satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias necesidades".






El ámbito del desarrollo sostenible puede dividirse conceptualmente en tres partes: ambiental, económica y social. Se considera el aspecto social por la relación entre el bienestar social con el medio ambiente y la bonanza económica. El triple resultado es un conjunto de indicadores de desempeño de una organización en las tres áreas.


Deben satisfacerse las necesidades de la sociedad como alimentación, ropa, vivienda y trabajo, pues si la pobreza es habitual, el mundo estará encaminado a catástrofes de varios tipos, incluidas las ecológicas. Asimismo, el desarrollo y el bienestar social, están limitados por el nivel tecnológico, los recursos del medio ambiente y la capacidad del medio ambiente para absorber los efectos de la actividad humana.


Ante esta situación, se plantea la posibilidad de mejorar la tecnología y la organización social de forma que el medio ambiente pueda recuperarse al mismo ritmo que es afectado por la actividad humana.


Aplicación en actividades productivas y de servicios:


Un ejemplo de aplicación es con las herramientas de implementación de desarrollo sostenible en la producción y los servicios, como puede ser el conjunto de actividades denominadas Producción Más Limpia.


Dicho concepto parte del principio de sostenibilidad de las actividades humanas requeridas para suplir necesidades básicas y suplementarias (calidad de vida), incorporando elementos como mínimas emisiones, buenas prácticas de producción y operación, manejo adecuado y aprovechamiento del subproducto y el residuo, disminución en el consumo de insumos, etc.


De esta forma, se observa que el desarrollo sostenible no es por sí mismo un elemento sociológico, sino que debe hacer parte de un tejido en el cual la producción, la economía, el bienestar y el ambiente juegan siempre del mismo lado.


Este concepto de desarrollo sostenible, se enfoca desde el lado de la oferta ambiental, bajo la óptica de obtener rendimientos firmes.


Es decir, una productividad básica, de acuerdo a la capacidad que pueden suministrar los ecosistemas.


Otra dimensión del concepto es que el contexto desde donde se enfoca el desarrollo tiende a ser diferente en los países latinoamericanos, parte de un ámbito nacional a uno global, que se asienta en interrelaciones globales y de naturaleza local.


La evolución del pensamiento sobre el desarrollo, en términos históricos, se ha dado en el marco de luchas sociales, a través de la pugna entre el capitalismo y el socialismo, entre la clase obrera y el capital y el pensamiento humano y las fuerzas de la naturaleza.


A lo largo de las últimas siete décadas del siglo XX, y parte de esta primera década del siglo XXI, el concepto de desarrollo se ha expandido y enriquecido, pero también se ha fragmentado, puesto que se va tomando de él aspectos de acuerdo a la gravedad que confronten los países en su diagnóstico ambiental, sin ser asumido como una orientación universal de cuidado del medio ambiente, algo que no se tiene en cuenta


Administración ambiental


Se entiende por administración ambiental al conjunto de diligencias conducentes al manejo del sistema ambiental.


Dicho de otro modo, e incluyendo el concepto de desarrollo sostenible, es la estrategia mediante la cual se organizan las actividades antrópicas que afectan al ambiente, con el fin de lograr una adecuada calidad de vida, previniendo o mitigando los problemas ambientales.


La gestión o administración ambiental responde al "como hay que hacer" para conseguir lo planteado por el desarrollo sostenible, es decir, para conseguir un equilibrio adecuado para el desarrollo económico, crecimiento de la población, uso racional de los recursos y protección y conservación del ambiente.


ISO 14001


ISO 14001 es una norma aceptada internacionalmente que establece cómo implementar un sistema de gestión medioambiental (SGM) eficaz. La norma se ha concebido para gestionar el delicado equilibrio entre el mantenimiento de la rentabilidad y la reducción del impacto medioambiental. Con el compromiso de toda la organización, permite lograr ambos objetivos.


Lo que contiene ISO 14001:


• Requisitos generales


• Política medioambiental


• Planificación de la implementación y funcionamiento


• Comprobación y medidas correctivas


• Revisión de gestión


Ello significa que puede identificar aspectos del negocio que tienen un impacto en el medio ambiente y comprender las leyes medioambientales que son significativas para esa situación. El paso siguiente consiste en generar objetivos de mejora y un programa de gestión para alcanzarlos, con revisiones periódicas para la mejora continua. De este modo, podemos evaluar el sistema regularmente y, si cumple la normativa, registrar la compañía o la sede para la norma ISO 14001.


¿Para quién es significativo?


El impacto medioambiental se está convirtiendo en un asunto importante en todo el globo. La presión para minimizar ese impacto procede de muchas fuentes: gobiernos locales y nacionales, organismos reguladores, asociaciones sectoriales, clientes, empleados y accionistas.


Las presiones sociales también proceden del creciente despliegue de grupos de interés o partes interesadas, como consumidores, organizaciones no gubernamentales (ONG) dedicadas al medio ambiente o a los intereses de grupos minoritarios, círculos académicos y asociaciones vecinales.


De modo que la norma ISO 14001 resulta significativa para toda organización, incluidas:


• Compañías de una sola sede y grandes compañías multinacionales


• Compañías de alto riesgo y organizaciones de servicio de bajo riesgo


• Industrias manufactureras, de procesos y servicios, incluidos los gobiernos locales


• Todos los sectores industriales tanto públicos como privados


• Fabricantes de equipo original y sus proveedores.


Ventajas asociadas a la certificación ISO 14001


Se ha evidenciado que la certificación ISO 14001 puede mejorar tanto el resultado medioambiental como el económico, proporcionando a la organización la oportunidad de vincular metas y objetivos ambientales con resultados financieros específicos, y de ese modo asegurar que los recursos estén disponibles donde ellos aportan el mayor beneficio en términos financieros y ambientales.


Los beneficios potenciales asociados con un SGA efectivo incluyen:


• rediseño de los procesos productivos;


• asegurar a los clientes el compromiso de una gestión ambiental demostrable;


• desarrollar un sistema de información determinante para la construcción de la ventaja competitiva.


• mejorar las relaciones de la empresa con el público, el gobierno, la comunidad y las autoridades ambientales;


• satisfacer los criterios de certificación e inversionistas;


• mejorar el acceso al capital;


• obtener seguros a costos razonables;


• reducir incidentes que puedan concluir en pérdidas por responsabilidades legales;


• ahorro de consumo de materias primas, materiales y energía;


• facilitar la obtención de permisos y autorizaciones;


• mejorar la imagen corporativa de la empresa, facilitando la introducción en nuevos mercados


• hacer uso de las oportunidades del marketing ecológico.


Conclusiones


La implementación de la ISO 14001:2004 se puede considerar una inversión proactiva, que sin lugar a dudas le proporcionará a las empresas, entre otros, los siguientes beneficios:


1. Disponer de una herramienta eficaz para mejorar continuamente el desempeño medioambiental, los resultados económicos y el acceso a nuevos mercados.


2. Establecer procedimientos eficaces para identificar y tener acceso a la legislación ambiental vigente, aplicable a sus aspectos e impactos ambiéntenles; así como evaluar periódicamente el cumplimiento de dicha legislación.


3. Integrar la gestión ambiental al sistema de gestión general de la empresa empresarial.


4. Utilizar la variable ambienta como un factor de competitividad empresarial.


5. Mejorar la eficiencia de la empresa, y por ende los costos, el aprovechamiento de nuevas oportunidades de mercado y la imagen corporativa


Finalmente, estimado lector, si su organización desea asumir un verdadero papel efectivo de contribución al desarrollo sustentable, aún cuando no pretenda certificarse con la ISO 14001, puede aplicar las disposiciones y recomendaciones de dicha norma de manera práctica y sistemática.