En este sentido, recomiendo:
"¿Para qué sirve la ética? –se pregunta Adela
Cortina en uno de los capítulos– Para recordar que es más prudente
cooperar que buscar el máximo beneficio individual, caiga quien caiga, buscar
aliados más que enemigos.
Y que esto vale para las personas, para las
organizaciones, para los pueblos y para los países".