Conductas
para políticos y funcionarios públicos con relación a la participación
ciudadana en redes sociales
A usted, profesional
de la política, representante popular o funcionario público, que considera que la democracia es algo más que votar cada tres y seis
años, que sueña con un sistema en el que la política sea algo más que una lucha
entre partidos, que desea ser útil a la sociedad y que anhela que esa sociedad
conceda legitimidad al trabajo de los políticos y funcionarios públicos[1], ofrezco este dodecálogo
de Conductas para políticos y funcionarios con relación a la participación ciudadana en redes sociales por Internet.
Observe que no está
dirigido a ciudadanas y ciudadanos que participan en redes sociales con
relación a asuntos públicos. Es para políticos y funcionarios públicos
involucrados en dicha participación ciudadana.
1. Participación ciudadana significa que las ciudadanas y los
ciudadanos sean parte de las decisiones y acciones públicas. Dar información no es dar participación. Recoger información no
es dar participación. La participación tiene que ver con tomar decisiones. Ten
presente que sólo se establece una sociedad civil fuerte cuando se abren los
procesos de decisión a la participación ciudadana.
2. Escuche, escuche, escuche. Es muy probable que ya exista una conversación (en twitter, facebook, etc.) acerca del asunto
que le ocupa. Si la conversación ya existe, entérese bien de qué se está
diciendo y de quiénes son los protagonistas en esa red de diálogo.
Tranquilidad: internet es un enorme locutorio dotado de herramientas para la
escucha.
3. Si la conversación
ya existe, es mejor que no trate de iniciarla (ya existe, ¿recuerda?), de monopolizarla (¿para qué reducir su
diversidad?), ni de capitalizarla (no podrá) o de distorsionarla (se detectará
fácilmente). Confórmese con entrar en ella. Con el tiempo, tal vez se convierta usted en un nodo significativo de la red conversacional.
4. Cuando no existe la conversación, pregúntese si vale la pena
iniciarla. Si hasta ahora el tema o asunto no ha
sido interesante para la gente, ¿qué puede hacer para que se vuelva
atractivo? La gente participa en aquello que le resulta cercano, habitual,
fácil, natural, y que ofrece algo que ganar.
5. Enlace, enlace, enlace. Entre en las conversaciones de los demás. No sea la cabeza de
todas las conversaciones. Deje en todas partes buen recuerdo de usted. No hay
mejor forma de lograr que alguien se interese en el asunto que usted propone
que demostrando que usted se interesa por los asuntos que exponen, comentan y/o
proponen las demás personas.
6. Ábrase al mundo. Piense que en una conversación, una institución no es un
interlocutor. La conversación es un asunto de personas. Tendrá que arriesgar.
Tendrá que realizar afirmaciones provisionales y en su caso rectificar. Tendrá
que mostrar algunas filias y fobias. Sea transparente. Las personas que
participan en relación a algún asunto pueden perdonar si usted corrige su
posición cuando ésta lo amerite.
7. La actitud lo es todo en una relación entre personas. Derroche buena actitud. Demuestre
humor, aguante, elegancia, tolerancia, respeto.
8. No se preocupes demasiado por la cantidad de personas que participan, sino por la cantidad
de buenas conversaciones que se establecen. Participar es un acto voluntario. Y
no se preocupe mucho por tratar de impedir que una persona o muchas hagan un mal uso
de su capacidad de influencia y persuasión en las redes sociales; preocúpese
mejor por cómo va a conseguir que muchísimas personas hagan un buen uso de ello
y que confíen en usted.
9. Debe saber que no
es tiempo de obediencia ciega, ni siquiera tuerta. Si usted es parte del gobierno, del
congreso o de la administración pública que está siendo cuestionada por
diversos actos o decisiones que no gustan a un gran número de ciudadana/os, tenga
cuidado: no confunda la lealtad al servicio público con la complicidad con otros
políticos o funcionarios públicos de dudosa confiabilidad o de comprobada no-confiabilidad.
10. Los ciudadanos
adultos merecen ser tratados como tales. No sea paternal, ni maternal con ellos. Permita la libertad y la
responsabilidad. Deje en sus manos los asuntos que les atañen. Deje que se equivoquen
por sí mismos o que le hagan ver sus equivocaciones. La participación implica
respeto por los participantes.
11. Los destinatarios de
las políticas públicas pueden ayudar a mejorar su diseño e implantación y,
obviamente, hacerlas más acorde a sus deseos. Sin embargo, no espere a corto
plazo que los resultados sean magníficos. Al principio, lo importante es la
cantidad. Valorar la participación puede matarla antes de nacer. El primer objetivo es generar una
comunidad activa, dar pasos hacia una ciudadanía participativa y corresponsable
con las autoridades en los asuntos públicos.
12. Y, finalmente, actúe según estos tres principios: (1) La mala
participación ciudadana es contraproducente, porque siembra desconfianza y
desánimo. (2) La ausencia de participación ciudadana es aún peor que la mala
participación. (3) Es peligroso hacer pasar como participación la mera
manipulación a la que a veces recurren las autoridades públicas.
…
Formulado por Alberto Haaz Díaz, con base en aportaciones que se
encuentran en http://eadminblog.ne
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh55Tg1SqSWwg1A4LTLxVl9eDS22QzF7eWiXx9rb-TMgDcBiLgsUxTZgBtzVNScTYgc3Her6mOKjDF0g3ysu-yDQUqRn9AO4wSQhDI1pr7JHBEAwlKY1vnOZZoRoBp-BSte-0uWs2ds4_Lr/s320/Hz+conferencias+seminarios+cursos.png)
.......
Vea más "Cápsulas de Competitividad y Excelencia"
También vea Blog de Haaz en la Red Ning